La VERDAD sobre el amor

amor incondicional

¿Cuántas veces hemos sufrido por amor? ¿Qué podemos decir del amor? ¿Existe el amor incondicional? ¿Puede realmente existir entre dos seres humanos? Se trata de preguntas que frecuentemente hacemos.

Un día Shankaran Pillai fue a un parque. Él vio a una mujer atractiva sentada en un banco de piedra y decidió sentarse a su lado. Al cabo de unos minutos, se acercó un poco más a ella. Ella se alejó de él de inmediato. Shankaran Pillai esperó unos minutos, volvió a acercarse a ella y esta se aleja de nuevo. Cuando volvió a hacer esto, ella se movió hasta el extremo del banco. Él se aproximó a ella y le pasó el brazo por el hombro. Ella lo apartó de un empujón. Entonces él se puso de rodillas, arrancó una flor y se la entregó diciendo: -Te amo como no he amado a nadie en mi vida.

El sol estaba poniéndose. Él tenía una flor en la mano. Él la veía con una mirada que derrite. Sobre todo, la atmósfera era la adecuada. Ella se relajó. La naturaleza tomó las riendas e hicieron lo que querían el uno con el otro. El atardecer se convirtió en la noche. De pronto, Shankaran Pillai se levantó de un salto y anunció:
– Son las ocho Tengo que irme.
– ¿Qué? ¿Ahora? ¡Acabas de decirme que me amas más que a nadie! -replicó ella.

-Si, si, por supuesto, pero mi esposa me espera.

Generalmente nuestras relaciones se enmarcan en contextos que nos resultan cómodos y provechosos. La gente tiene necesidades físicas, psicológicas, emocionales, económicas y sociales. Una de las mejores formas de satisfacerlas es decirle a alguien: «Te amo». Eso que llamamos amor se ha convertido en un mantra tipo «¡ábrete, sésamo!». Puedes conseguir lo que quieras diciéndolo.

El amor es una cualidad, no algo que haces con otra persona. Toda acción que realizamos la hacemos para, de alguna forma, satisfacer ciertas necesidades. Si puedes ver esto, existe la posibilidad de que desarrolles la capacidad de amar de forma natural. Pero puedes continuar engañándote, creyendo que las relaciones que has establecido por conveniencia, comodidad y bienestar son en realidad relaciones de amor. No estoy diciendo que no haya una experiencia de amor en estas asociaciones, pero es con ciertas limitaciones. No importa cuántas veces hayas declarado tu amor, si unas cuantas expectativas y condiciones no se cumplen, las cosas se derrumban. Este es esencialmente un esquema de beneficio mutuo.

En realidad, no existen los conceptos de amor condicional e incondicional.

Hay condiciones y hay amor. Cuando hablas del amor, tiene que ser incondicional. En el momento en que hay una condición, viene a ser lo mismo que una transacción. Tal vez constituya una transacción conveniente, tal vez un buen acuerdo, pero no te llenará ni te transportará a otra dimensión: será una mera conveniencia. El amor no tiene por qué ser conveniente y generalmente no lo es.

Existe una diferencia entre una transacción y un romance. Este último no tiene por qué dirigirse a ninguna persona en particular: podrías vivir un gran amor con la vida misma.

Lo que haces o dejas de hacer es de acuerdo con tus circunstancias. Nuestras acciones están siempre moldeadas por las exigencias externas. Pero el amor es un estado interno, y como estás en tu interior puede ser definitivamente incondicional. Los actos de amor pueden llegar a ser tediosos y estresantes al cabo de un tiempo. Te das cuenta de que el amor no es algo que haces: EL AMOR ES TU MANERA DE SER.

 

Créditos: Libro, Ingeniería interior, Sadhgurú, editorial Gaia.

Ejercicio:

El amor no sucede entre dos personas. Es lo que pasa dentro de ti, y tu interior no necesita esclavizarse a nadie ni nada. Prueba este ejercicio durante unos quince minutos: siéntate junto a algo que no tenga ningún valor para ti ahora mismo, tal vez un árbol, una piedra, un gusano o algún otro insecto. Repite esta acción durante varios días seguidos. Al cabo de un tiempo descubrirás que puedes mirar al objeto elegido con tanto amor como a tu esposa o esposo, tu madre o tu hijo. Tal vez el gusano no lo sepa, pero no importa. Si miras a todo amorosamente, el mundo se vuelve bello en tu experiencia.

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